Hoy ha sido un día de esos, y yo sólo escribo en esos días.
En los que son peculiares, digo.
Me acosté tarde "anoche", en medio de conversaciones interesantes y prometedoras. Me levanté temprano esta mañana y llegué tarde a donde iba; pero no importa.
Me concentré en lo que hacía, hasta que me desconcentré.
Obvio.
Hay días como hoy, que aparentemente no tienen nada que ver (es sábado, es de mañana tempranito, estoy en un plan supremamente diferente, es 7, es mayo) con mis calendarios o mis recuerdos de mi inconsciente; pero que me revuelven todo por dentro.
En clase, mi profesora y ahora "amiga" hablaba y hablaba como suele hacer. (Espero que no me lea)
En medio de tanta habladuría de cosas que para mí son de "sentido común" (el menos común de los sentidos, y NO DOY CRÉDITO POR LA FRASE, SO FUCK OFF YOU -sorry por las mayúsculas, el insulto y el "you"; pero pues a no ser que seas "you", no es contigo, ¿vale?-), me elevé y me elevé así como acabo de hacer ahora en medio de la frase.
Que como dicen los españoles: me enredo como las persianas.
Anyway.
Me elevé, me elevé, me elevé.
Pensé en cómo me sentía. En que ahorita hacen tres meses, y la verdad es que fuera de cómo me siento con respecto a lo que pasó, han sido tres meses en los que no ha habido mayor traumatismo o diferencia.
Mi rutina sigue igual, nada alterada.
Hago lo mismo, casi a las mismas horas.
Voy a mis reuniones de trabajo, me muevo, camino, compro, salgo, voy, vengo.
Me veo mis pelis y mis series como si nada, juego mis juegos como si nada.
Así que, si lo pienso bien, el hecho de que hubiera decidido salir de mi vida no ha hecho mayor .... "diferencia". Digo.
So, punto para mí. O para la vida. O para el que sea.
Además, he salido más con mis amigos, he conocido gente, volví al gimnasio (sí, créanme, tengo fotos que lo respaldan), estoy viviendo y sintiendo muchas cosas que pensé que jamás me pasarían a mí, y me he vuelto más independiente entre comillas, sin las comillas.
So, punto para mí. O para la vida. O para el que sea.
Pero.
Siempre hay un pero.
Fucking pero.
Pero, siempre tengo que verle el "otro lado" a las cosas.
Como el lado de que a los quince días andaba con alguien más y "no lo iba a poner en pausa".
Como que me encontré, borrando archivos, una conversación de diciembre de 2009 (Joder, cuánto tiempo en las mismas), en la que me decía que le "tomaría muchísimo tiempo superarme".
Como que su "para siempre" fueron tres años y obvio, su "muchísimo tiempo" entonces eran dos semanas.
Obvio. Duh.
Como que me dijo que había perdido el tiempo conmigo.
Y vainas así que no tengo por qué pensar, porque realmente estoy bien, pero que me revuelven el estómago y me dan rabia, física rabia.
Y entonces, mientras pienso eso se me ocurre que sería bueno que le cayera un rayo encima.
Pero entonces digo que a mí me caerían tres. Barro.
En la tarde llego a mi casa y escucho una enseñanza sobre el perdón.
De cómo uno se sitúa en otra esfera emocional cuando suelta ese peso que sólo le hace daño a uno mismo.
Obvio.
Pero yo aún como que no.
Me gustaría, sí, poder decir que no pasó nada, que todo está bien, que fue lo mejor.
Which is, you know?
Pero no sé.
Me gustaría poder estar con él y con otras personas, siempre con otras personas, en la misma habitación-bar-salón-fiesta y reír y hablar como si nada.
Me gustaría que me diera lo mismo. Pero pa'yá.
Pero no sé.
Pienso que por "orgullo" no debería.
Que la posición en la que estoy, de esquivarlo cuando lo veo, de hablarle de "usted" cuando le escribo o ese tipo de cosas que solamente han pasado UNA VEZ, es la que debo mantener.
Pero no sé.
So, este es un día en el que estoy bien, pero como que mi cabeza no se conforma y tiene que joder.
So, este es un día que no tiene nada que ver con mi inconsciente pero que no ha terminado de ser.
So, este es un día peculiar.
Ojalá hubiera cambiado esa "e" por una "a".
Ahí se las dejo.
